Sistema de gestión empresarial
Desde un punto de vista meramente administrativo, un sistema de gestión empresarial es el conjunto de procesos, políticas, prácticas, filosofía y procedimientos que se utilizan para el manejo de información, elaboración de estrategias y aplicación de planes de trabajo de una entidad de cualquier tipo. Debido a su naturaleza, este tipo de sistema es fundamental para el correcto accionar de cualquier empresa, pues es parte esencial de la estructura de trabajo de la organización.
En pocas palabras, el manejo correcto de la información en todos los niveles de operación de una compañía, su recolección, procesamiento, almacenamiento, análisis y uso, depende de este sistema.
Por supuesto, debido a las necesidades y exigencias del mundo empresarial actual y la enorme ola tecnológica que ha inundado todos los ámbitos de la vida, no es extraño que existan programas de cómputo diseñados para realizar todas estas tareas de manera automatizada.
Conocido en inglés como Management Information System, este tipo de software se ha utilizado desde su aparición en diferentes tipos de empresas, con diferentes giros, características y en diferentes sectores de la industria, siempre con el objetivo de facilitar y agilizar los procedimientos, desde la producción hasta la venta de la mercancía o servicio.
Importancia de contar con sistemas de gestión empresarial
La creciente necesidad que se tiene en el mundo actual por contar con procesos automatizados, por realizar las cosas lo más rápido posible y sin perder eficiencia son indudablemente las razones por las que el mercado se ocupó de crear herramientas tecnológicas como el sistema de gestión empresarial, herramienta que recoge, almacena, procesa y analiza información, evita la comisión de errores, multiplica las posibilidades de análisis y facilita el uso práctico de la información.
Cabe aclarar que cuando se habla de un Management Information System no se refiere a un programa específico, sino a cualquier software diseñado con el objetivo de realizar y facilitar las tareas administrativas de cualquier empresa y cualquier área que incluye la contabilidad, los inventarios, las compras y ventas, la toma de decisiones a nivel directivo, entre otras.
Aclarado este punto, se debe entender que la base fundamental sobre la que trabaja cualquiera de estos sistemas informáticos es la premisa de que cada proceso que forma parte de la cadena de producción puede ser realizado de una manera mucho más eficaz si se integra el trabajo y la eficiencia de una máquina con la capacidad de análisis de los trabajadores y empresarios.
Por esta razón, todo este tipo de programas cuenta con sistemas de manejo de bases de datos con una gran cantidad de información, al igual que diferentes funciones para la planificación, programación, análisis y uso de información, es decir, se trata de sistemas automatizados, pero programados y susceptibles de ser manipulados por los trabajadores, aunque con filtros que aseguran que su manipulación sea con fines de mejorar los procesos.
La información es uno de los activos más importantes para las organizaciones en la actualidad, desde la empresa más pequeña hasta el más grande corporativo, razón por la que la función principal de un sistema de gestión empresarial es el tratamiento de este activo. Pero, para garantizar su funcionalidad y efectividad, es necesario que la información ingresada sea veraz y de calidad, es decir, que sea cierta y útil.
A diferencia de otros ámbitos, cuando de información se trata, la cantidad es tan importante como la calidad, ya que entre más información se tiene se reduce el rango de error, se amplía el abanico de opciones y los resultados posibles son mucho más positivos. Todo esto, siempre y cuando la información sea relevante.
De igual forma, la oportunidad de la información es fundamental, es decir, que se tenga en el momento justo, pues los tiempos en el mundo de los negocios son fundamentales y a veces un par de días, horas e incluso minutos pueden marcar la diferencia entre tomar una buena decisión a tiempo o no.
Hace años, toda esta labor tendría que haber sido realizada por el personal de las diferentes áreas y habría consumido incluso semanas de trabajo; hoy en día, un buen sistema, bien implementado, con la información correcta de cada área, es suficiente para llevar a cabo el análisis y en mucho menos tiempo.
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Un sistema de gestión empresarial no necesariamente es bueno, pues como se ha mencionado, existe una gran cantidad de programas en el mercado actual, sin embargo, no todos son completamente funcionales y otros son muy especializados, por lo que pueden resultar sumamente útiles para un tipo de empresa, pero ineficientes para otra.
Por lo anterior, es necesario contemplar las características y necesidades de una empresa, de manera que se pueda elegir el software más adecuado para la administración de esta, un programa que ayude a alcanzar los objetivos y metas de la organización y que se adapte lo mejor posible a la cadena de producción particular de la entidad para la que el sistema trabajará.
Para esto es importante contar con el apoyo y la asesoría de un experto en la materia, de manera que el programa que se implemente cumpla con los objetivos principales y ofrezca los beneficios prometidos: un sistema orientado a las labores y objetivos del negocio, que pueda ser integrado a los sistemas existentes, que sea flexible y de fácil uso.
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